Auroras
XVII
¡Por el aire!, ¡por el aire me llegó tu beso al alma!
XVIII
Para saber quien eres, escribo poesía; para aliviar tu
llanto, escribo poesía; para sentirte, amor, escribo poesía; para soñar
contigo, escribo poesía.
XIX
Vengo de la nada; hacia la nada, voy: humano, pintando paredes
con denuncias de amor, que gritan lo falto que estoy de tus besos de agua.
XX
Entretanto, te tengo abrazada a lo abstracto de mi cuerpo;
anhelante, en un éxtasis que cabalga el horizonte.
XXI
Me persigue una tormenta oscura, que palpita cuando cierro
los ojos en la profundidad del abismo que me mira.
XXII
Yo no aceptaré nunca que no me beses, Poesía.
Prefiero hundirme, cortarme las venas. De la imaginación sin luz,
matarme.
XXIII
El frío es seguir sin ti... y escuchar los círculos humanos debajo de la lluvia del
olvido.
XXIV
La distancia no podrá vencernos, amor. Somos el deseo de
vernos, el alma de los besos, el tiempo del tiempo.
Sin discusión, me quedo con la XXI, Moisés.
ResponderEliminarAunque todas las estrofas son muy pensadas y muy buenas.
Un abrazo
Es la dulce elegancia de tu poesía la que acuna mi noche triste.
ResponderEliminarExtraordinario, inmejorable, es un mundo cada Aurora.
Mi mas profunda admiración, eres insuperable.
Un beso Poeta.